Algunas aldeas de Alcalá la Real fueron las elegidas para realizar esta actividad que desarrolló Israel Serrano, técnico de ADSUR en la parte de Cultural. IDEAL habló con él sobre esta actividad y sobre otros proyectos que van a llevar cabo próximamente.
Los colegios de las aldeas de La Rábita, Santa Ana, Charilla, Mures, Ermita Nueva y La Pedriza. Estas seis aldeas han sido seleccionadas desde ADSUR para llevar a cabo el taller de narración oral ‘Leer es divertido’. Esta asociación, que trabaja desde 1995 con el fin de «impulsar la actividad económica y el dinamismo social y cultural de la comarca», centro ésta actividad en las aldeas de Alcalá la Real ya que, como explicó el propio Israel Serrano, «hay que darles visibilidad y ofrecerles las mismas oportunidades que a los municipios mayores».
La actividad propuesta tiene un objetivo claro: mostrar a los más pequeños que la lectura puede ser algo divertido. «Muchas veces por desconocimiento o porque no hayan dado con un tipo de lectura que les guste pueden tener la idea de que la lectura es una actividad aburrida que les imponen desde el colegio» reflexionó Serrano.
La estructura de estos talleres consta de dos partes, una en la que se narran los cuentos de una forma ‘tradicional’, y otra en la que se utiliza unkamishibai, una técnica japonesa en la que se acompaña la narración con una especie de teatro como recurso didáctico. Como comentó el propio Israel Serrano, al comentar la actividad con los centros escolares, muchos nos conocían de esta técnica por los decidieron introducirla para, además, mostrar algo novedoso a los escolares.
La experiencia ha sido muy positiva, tanto para los alumnos, como para el propio Israel Serrano. Más de 200 niños de las diferentes aldeas de la localidad se han beneficiado de esta actividad en la que los cuentos era muy participativos y animaban a que los niños participasen junto al narrador. «A la hora de enriquecer vocabulario o de ayudarte a expresarte mejor, la lectura resulta fundamenta» destacó Serrano y eso es algo que los pequeños deben ir trabajando desde edades tempranas.
Una actividad en la que han participado todos los alumnos del centro, desde los tres años hasta los doce años. Hacerlos partícipes del propio taller de narración hacen que sea mucho más fácil que cale en mensaje en ellos y, lo cierto es que tanto alumnos como el propio Israel Serrano han quedado muy satisfechos con la actividad.Tanto es así que se plantean hacer más actividades de este estilo, animando a la lectura, pero con un enfoque diferente. «En próximos proyectos apostaremos por la lectura pero con un enfoque de igualdad o de respeto por el medio ambiente» adelantó Serrano. Todo ello para favorecer el desarrollo personal de los más pequeños.
Fuente: ideal de Jaén. Una información de M. Nieto