La Asociación para el Desarrollo Rural de Andalucía (ARA) se creó en noviembre de 1993 en un intento de gestionar coordinadamente y transferir las experiencias y conocimientos entre los GDR que empezaban a trabajar con una filosofía innovadora de participación y enfoque "desde abajo hacia arriba" con intervención de los agentes públicos y privados sociales, económicos y culturales.
Desde un principio, los Grupos de Desarrollo han tratado de detectar recursos endógenos en el mundo rural, no basados exclusivamente en la agricultura y la ganadería, y que mediante la diversificación económica pudieran complementarse rentas así como crear y consolidar nuevos puestos de trabajo. En definitiva, generar riqueza en el medio rural en un intento de fijar la población en su entorno natural.