Los Grupos de Desarrollo Rural están sobre el terreno, hacen el trabajo de campo e intentan que en los pueblos existan los mismos servicios que en la ciudad
Que los bancos mantengan sus oficinas en los pueblos o que las empresas de telefonía lleven la conectividad a los pueblos más pequeños son algunos ejemplos de cómo frenar la despoblación rural. Pero, igual de importante es que los vecinos dispongan de pequeños comercios donde abastecerse de productos y servicios necesarios.
Es el caso la empresa Medina Ruiz, Industrias Cárnicas en Jimera de Líbar (Málaga). Con las ayudas LEADER tramitadas desde el GDR Sierra de las Nieves y Serranía de Ronda ha abierto un punto de venta al por menor en este pueblo y ofrece a sus vecinos este servicio del que hasta ahora se carecía.
Natalia Medina Ruiz es la gerenta de esta empresa familiar situada en el corazón del Valle de Guadiaro entre la Sierra de Grazalema y el Parque Natural de los Alcornocales. Se dedica a la elaboración y comercialización de embutido y productos cárnicos y cuenta con dos líneas de trabajo; embutidos Medina centrado en productos artesanos y Pura veta que comercializa carne gourmet de vacuno, ibérico, caza, etc. para el canal Horeca.
Esta emprendedora, cuya familia ha estado vinculada al sector cárnico desde hace más de 60 años, explica que los GDR son los que realmente conocen las necesidades de las empresas rurales.
Web del proyecto: www.embutidosmedina.com